Camina por el Parque de la Paz de Hiroshima con una guía local que comparte historias reales detrás de cada lugar. Explora el museo a tu ritmo, contempla de cerca el Domo de la Bomba Atómica y disfruta un almuerzo en Orizuru Tower con vistas a la ciudad actual. No es solo historia — es algo personal, reflexivo y profundamente emotivo.
¿Alguna vez te has preguntado qué se siente realmente al estar frente al Domo de la Bomba Atómica? Yo no esperaba que se me apretara el pecho solo con ver su esqueleto recortado contra el cielo claro. Nuestra guía, Yuki, nos esperaba justo afuera del Parque Conmemorativo de la Paz de Hiroshima — nació aquí y se notaba. Cada poco se detenía para saludar a viejos amigos o señalar detalles que yo habría pasado por alto: grullas de papel escondidas en rincones, niños corriendo entre las piedras del memorial. El aire olía a hierba mojada (había llovido esa mañana) y había un silencio especial, a pesar de estar en pleno centro de la ciudad.
El Museo Conmemorativo de la Paz de Hiroshima es difícil de explicar. Algunas partes son tranquilas, casi suaves — otras te golpean directo al corazón. Yuki no nos apuró. Nos contó cómo su abuela hablaba del 6 de agosto de 1945; no solo datos, sino recuerdos — hacer fila por agua, buscar a la familia. Me sorprendí frenando en ciertos espacios, con las manos en los bolsillos. Afuera hay un árbol — el Aogiri — que de alguna manera sobrevivió a la explosión. La gente sigue atando deseos a sus ramas. Parece sencillo, pero estar ahí se siente a la vez pesado y lleno de esperanza.
El almuerzo fue en lo alto de Orizuru Tower. Desde ahí tienes una vista amplia de Hiroshima; es curioso lo tranquila que se ve ahora. Comimos con nuestra guía (el almuerzo está incluido) y probamos okonomiyaki — un plato un poco desordenado pero reconfortante. Intenté decir “itadakimasu” bien; Yuki se rió y me corrigió (seguro lo arruiné). Luego caminamos de regreso por el parque hacia el templo Chishaku-in. No dejaba de pensar en todo lo que ha cambiado aquí — pero también en lo que queda en el aire si te fijas bien.
El tour dura aproximadamente 5 horas de principio a fin.
Sí, el almuerzo en Orizuru Tower está incluido en el tour.
Sí, la entrada al Museo Conmemorativo de la Paz y a Orizuru Tower están incluidas.
Los platos se preparan en cocinas externas; las opciones vegetarianas son limitadas y no se garantiza la disponibilidad para dietas sin gluten o alergias.
El museo incluye exposiciones gráficas que pueden afectar a niños pequeños; avisa a tu guía si tienes dudas.
No, no hay recogida en hotel; el punto de encuentro es cerca del Parque Conmemorativo de la Paz.
No; algunos lugares del recorrido no son accesibles para sillas de ruedas o cochecitos.
El tour finaliza cerca del templo Chishaku-in en Hiroshima.
Tu día incluye entrada al Museo Conmemorativo de la Paz y al mirador de Orizuru Tower, una caminata guiada por alguien de Hiroshima que comparte historias personales, además de un almuerzo con vistas a la ciudad antes de terminar cerca del templo Chishaku-in. También recibirás fotos del tour como recuerdo.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?