Saldrás del Lago de Garda antes del amanecer y llegarás a Venecia en autobús, luego entrarás a la ciudad en un barco privado con tu guía local. Pasea por la Plaza de San Marcos, escucha historias con auriculares, cruza puentes icónicos y disfruta de tiempo libre para explorar o tomar un café. Un día completo que se queda contigo mucho después de volver al Lago de Garda.
No esperaba que Venecia oliera a sal y piedra antigua nada más bajar del barco. Salimos del Lago de Garda antes del amanecer—la verdad, casi me quedé dormido en el bus—pero en cuanto subimos a ese barco privado, todo se volvió más nítido. Nuestro guía, Marco, nos hizo señas para que nos asomáramos al pasamanos y viéramos cómo la ciudad iba apareciendo. No paraba de señalar cosas en italiano rápido y en inglés—algo sobre cómo el campanario se inclina un poco más cada año. No supe si bromeaba o no, pero me hizo mirar dos veces.
Los primeros pasos en la Plaza de San Marcos fueron abrumadores—tanta paloma y destellos de cámaras, ya sabes. El mármol bajo los pies aún estaba fresco por la lluvia de la noche anterior. Marco nos dio auriculares para que pudiéramos escucharlo bien entre la multitud (un detalle que no pensé que me importaría hasta que lo probé). Nos contó historias sobre el Puente de los Suspiros y cómo los presos miraban por última vez la luz del sol desde ahí. Me dio escalofríos por un momento—quizá solo era la brisa del agua, o algo más.
Después de cruzar el Puente de Rialto (que es aún más concurrido de lo que parece en las fotos) tuvimos tiempo libre. Me fui a buscar un espresso y traté de pedirlo en italiano—una señora mayor detrás del mostrador me corrigió, pero me sonrió igual. El café estaba amargo y perfecto, justo para cortar la humedad del aire. Por la tarde, las piernas ya me pesaban, pero no quería sentarme todavía; en Venecia hay una sensación de que si parpadeas mucho, te pierdes algo.
El tour dura unas 11 horas en total, incluyendo el traslado.
Sí, el transporte en autobús ida y vuelta entre Lago de Garda y Venecia está incluido.
Sí, por la tarde tienes tiempo libre para explorar o descansar por tu cuenta.
Todos los impuestos, tasas y cargos están incluidos en el precio.
Un guía acompaña el recorrido con comentarios en vivo.
Verás la Catedral y Plaza de San Marcos, el Puente de Rialto, el Campanario y el Puente de los Suspiros.
Un barco privado te lleva desde la parada del bus hasta el centro, cerca de la Plaza de San Marcos.
Sí, te dan auriculares para que escuches bien al guía durante el recorrido.
Tu día incluye traslado ida y vuelta en autobús desde Lago de Garda a Venecia con guía acompañante; comentarios en vivo durante todo el recorrido; todos los impuestos y tasas incluidos; auriculares para seguir las explicaciones durante las caminatas; y un paseo en barco privado desde la parada del bus hasta la Plaza de San Marcos antes de tu tiempo libre en Venecia.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?