Subirás en teleférico sobre campos de lava negra, caminarás junto a cráteres humeantes con un guía volcanólogo, explorarás una cueva de lava real (casco incluido) y terminarás el día probando miel y queso siciliano en una granja de Zafferana — momentos que recordarás cada vez que huelas humo de leña o escuches historias de volcanes.
“No te preocupes, el olor a azufre es solo porque está respirando,” nos sonrió nuestro guía volcanólogo al bajar del 4x4 cerca de la cima. Nunca había sentido un viento así: seco y cortante, con una mezcla extraña de aire frío y algo casi metálico. El suelo bajo mis botas estaba caliente en algunos puntos, y eso me puso un poco nervioso. El grupo se acercó al borde, donde se veía el vapor saliendo de los cráteres en la cima. Difícil de explicar lo silencioso que se ponía todo, solo el viento y el ruido de alguna chaqueta al ondear. No paraba de pensar: así debe sentirse Marte, pero sin el bullicio siciliano.
La excursión al Etna desde Catania empezó temprano — nos recogieron en el hotel, un alivio porque sin café soy un desastre con las direcciones. El viaje en teleférico fue como flotar sobre otro planeta; campos de lava negra debajo y parches de nieve que aún resistían, aunque ya era junio. A 2500 metros cambiamos a unos robustos autobuses 4x4 (me reí a carcajadas por lo movido que fue). Nuestro guía señalaba cicatrices de erupciones antiguas y nos contó sobre la de 2002 — pueblos enteros vieron la lava acercarse durante días. Escuchar eso de alguien que creció aquí hace que la historia cobre vida.
Luego paramos en una cueva de lava — cascos puestos, linternas iluminando paredes ásperas que olían a tierra y algo quemado. Mis manos se llenaron de polvo solo al rozar la entrada. Después, bajamos hacia Zafferana Etnea para una degustación en una granja familiar. Probé miel recién sacada de las colmenas (con los dedos pegajosos) y un queso que ni pude pronunciar — Li se rió cuando intenté decirlo en italiano. El sol se sentía más suave allí abajo y, después de tanta emoción volcánica, sentarse a la mesa con gente local fue el broche perfecto.
Se alcanza entre 2800 y 2900 metros con teleférico y autobús 4x4 durante la excursión.
Sí, incluye recogida en tu alojamiento o en un punto acordado.
Sí, se visita una cueva de flujo de lava con casco y linterna incluidos.
Termina con una degustación de productos típicos como miel y queso en una granja local de Zafferana Etnea.
No se recomienda para embarazadas, pero hay asientos especiales para bebés si se necesitan.
Sí, hay opciones de transporte público cerca de los puntos de encuentro.
Usa calzado cómodo y lleva ropa de abrigo por capas; el clima cambia rápido en altura y el suelo puede estar caliente o polvoriento.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel, todo el transporte en teleférico y autobús 4x4 por el Etna con guías expertos en cada tramo, cascos y linternas para explorar una cueva de lava real, agua embotellada durante el recorrido y tiempo en una granja familiar en Zafferana Etnea para degustar miel y quesos locales antes de bajar cómodamente.
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