Explora a fondo la selva de Sumatra desde Bukit Lawang con guías locales, avista orangutanes en libertad, nada en ríos y cascadas, comparte comidas junto al fuego y termina tu aventura navegando en rafting de regreso al pueblo. Prepárate para zapatos embarrados y recuerdos inolvidables — pero sobre todo, para sentirte realmente vivo.
Apenas habíamos salido de Bukit Lawang cuando el aire cambió — más denso, verde y con ese olor a tierra húmeda que solo encuentras en una selva de verdad. Nuestro guía, Indra, ya señalaba detalles que yo habría pasado por alto: un destello de pelaje naranja en lo alto (mi primer orangután, el corazón me latía fuerte), luego una pequeña rana sobre una hoja. La caminata no es fácil, pero tampoco es una prueba de fuerza; parábamos seguido para comer fruta (la piña nunca me había sabido tan dulce) y recuperar el aliento. Por la tarde, sudados pero sonrientes, llegamos al campamento junto al río. La cena la preparó nuestro “chef de la selva” sobre un fuego pequeño — todavía recuerdo su tempeh picante. Al caer la noche, nos sentamos a beber té dulce mientras alguien intentaba enseñarnos un juego de cartas indonesio. Yo perdí feo.
A la mañana siguiente desperté antes del amanecer por los monos — son ruidosos, pero luego resulta hasta reconfortante. El desayuno fue sencillo: café, galletas y huevos. Ese día nos adentramos más en la selva y vimos más animales de los que esperaba: gibones balanceándose como acróbatas y un varano tomando el sol en una roca. El segundo campamento estaba junto a una cascada tan fría que me dolieron los dientes al meterme (valió la pena). Después de cenar, Indra hizo un truco de magia que nos hizo reír a todos — él jura que no es mago, pero aún no entiendo cómo lo hizo.
La última mañana se sintió más tranquila; tal vez nadie quería irse todavía. Nadamos una vez más antes de preparar todo para el rafting — básicamente atar grandes tubos y dejarnos llevar río abajo hacia el pueblo. Es movido y te salpica, pero después de dos noches en la selva se siente como volar de regreso a casa. Si estás pensando en hacer este trekking de 3 días desde Bukit Lawang… simplemente hazlo. Hay algo en despertar rodeado de árboles y el ruido de los monos que queda grabado más que cualquier foto.
El recorrido es de tres días y dos noches por la selva de Gunung Leuser.
Se requiere buena condición física; el terreno puede ser empinado y resbaladizo en algunos tramos.
Sí, todas las comidas se preparan en el campamento por cocineros locales durante la ruta.
Hay buenas posibilidades de ver orangutanes en su hábitat natural.
El precio cubre zapatos para la selva, repelente de mosquitos, agua, permisos de entrada, todas las comidas y los impuestos.
Regresarás en rafting río abajo sobre tubos tradicionales hasta el pueblo de Bukit Lawang.
Esta excursión no es recomendada para embarazadas ni personas con problemas de columna o corazón.
Tu viaje incluye todos los permisos para las rutas en el bosque de Gunung Leuser, repelente de mosquitos y zapatos resistentes para la selva si los necesitas; agua durante todo el día y comidas frescas preparadas por locales — desayuno, almuerzo y cena están cubiertos antes del rafting de regreso a Bukit Lawang por la tarde.
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