Sentirás la fresca neblina del cráter en Kawah Putih antes de cruzar el puente colgante del sur de Bandung (o subir al divertido Sultan Basket). Relaja tus pies en aguas termales y termina con un almuerzo en un barco Pinisi frente al lago Situ Patenggang — todo con traslado desde el hotel y guía local para un día sin estrés.
Lo primero que me llamó la atención fue el olor — ese toque fuerte y a huevo podrido del azufre que percibes antes de ver Kawah Putih. Nuestra guía, Rina, sonrió al ver mi cara de sorpresa. “Eso significa que es auténtico,” dijo. El cráter parecía casi irreal — agua turquesa lechosa bajo un cielo que cambiaba entre gris y azul. Había algunas familias locales sacándose selfies y riéndose porque la neblina les erizaba el cabello. Intenté tomar una foto, pero la lente de mi cámara se empañaba todo el tiempo. Al final me rendí y solo me quedé viendo cómo el vapor se enroscaba sobre las rocas.
Salimos temprano de Bandung — el tráfico no era mucho, algo que me sorprendió. El camino hacia el sur era verde y tranquilo, con plantaciones de té deslizándose por la ventana. Después del Cráter Blanco, fuimos a un puente colgante que había visto en Instagram (es más largo de lo que parece en las fotos). Cruzarlo daba un poco de vértigo y nos hizo reír nerviosos. Había algo llamado “Sultan Basket” — una especie de canasta colgante que puedes usar para cruzar si no quieres caminar. Rina dijo que a los niños les encanta, pero creo que los adultos también; uno del grupo gritó “¡Estoy volando!” y todos nos partimos de risa.
Después mis piernas se sentían un poco flojas, así que remojar los pies en las piscinas termales fue justo lo que necesitaba. El agua olía un poco a minerales, pero sobre todo se sentía cálida y suave en la piel cansada. Terminamos en un restaurante con forma de barco Pinisi antiguo justo al lado del lago Situ Patenggang — la verdad, no esperaba mucho de un lugar turístico, pero el tempeh frito estaba tan crujiente que todavía lo recuerdo. La neblina se deslizaba sobre el agua mientras comíamos y la gente saludaba desde los botes de remo abajo.
Me gustó que todo fuera sencillo — coche privado, conductor amable (que ponía música dangdut bajito), sin prisas. Si buscas algo extremo o muy remoto, esto no es para ti. Pero si quieres ver paisajes extrañamente hermosos cerca de Bandung sin complicaciones… bueno, repetiría esta excursión solo por esa primera vista de Kawah Putih.
Está a unos 50 kilómetros al sur de Bandung; el viaje suele durar entre 1 y 2 horas en coche según el tráfico.
Sí, incluye transporte privado con recogida; puedes elegir el punto de encuentro contactándolos por WhatsApp.
Usa ropa y calzado cómodos; lleva una chaqueta porque puede hacer frío y estar húmedo cerca del cráter.
El tour incluye almuerzo en un restaurante junto al lago con temática de barco Pinisi indonesio.
Sí, pueden participar bebés y niños pequeños; se permiten cochecitos y carriolas.
Sí, hay opciones de transporte público cerca de los puntos de encuentro en Bandung.
No se recomienda para personas con problemas cardiovasculares por la altitud y las caminatas.
Incluye servicios de conductor y guía, vehículo con aire acondicionado, combustible, entradas a atracciones como el puente colgante y el remojo en aguas termales.
Tu día incluye traslado privado desde el hotel en Bandung (o donde prefieras), todas las entradas para el Cráter Blanco Kawah Putih, acceso al puente colgante (y paseo opcional en Sultan Basket), tiempo para remojar tus pies en aguas termales, además de almuerzo en un restaurante en un barco Pinisi junto al lago antes de regresar cómodo con tu guía y conductor.
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