Recorre senderos de montaña en quad desde Rethymno con un guía local, para en el lago Potami a tomar café y atraviesa pueblos cretenses que casi nadie visita. Observa buitres en la garganta de Prasses y termina con vistas panorámicas de la ciudad—prepárate para polvo, risas y recuerdos inolvidables.
Confieso que al subirnos a los quads a las afueras de Rethymno sentí un poco de nervios. El aire olía a tomillo calentado por el sol y a diésel, una mezcla rara pero que encaja perfecto con Creta. Nuestro guía, Manolis, nos sonreía y repetía: “no os preocupéis, os vais a llenar de polvo, pero os va a encantar”. Tenía razón en las dos cosas. Salimos del pueblo y en minutos ya saltábamos por caminos de tierra que serpenteaban montaña arriba. De vez en cuando veía olivares y esos muros de piedra seca que parecen eternos.
La palabra clave “quad safari rethymno” no hace justicia a la sensación de estar de repente en medio de la nada, con el viento golpeándote la cara y cabras cruzando el camino (una me miró fijamente). Paramos en un lago pequeñito llamado Potami. Allí hay un kafeneion antiguo junto al agua donde tomamos algo (no incluido, pero vale la pena por el café griego bien cargado). Intenté pedir en griego—Li se rió cuando dije “kafés ellinikós”—y el dueño solo sonrió y sirvió. El lugar olía a leña y pan dulce.
Después llegamos a la garganta de Prasses. No esperaba que fuera tan silenciosa, solo se oían pájaros—buitres enormes dando vueltas en el cielo, que Manolis señaló con un gesto como si fuera lo más normal. Los acantilados aquí son ásperos y rojizos; si pasas la mano sientes la arena bajo las uñas. También cruzamos varios pueblos pequeños—casas de piedra, viejos jugando a las cartas en la calle aunque apenas era mediodía. Allí el tiempo parecía ir más despacio.
De vuelta hay un mirador con vistas a todo Rethymno—el mar a un lado y las montañas detrás. A veces recuerdo esa vista cuando estoy atrapado en el tráfico de la ciudad. Para entonces mi camiseta ya estaba marrón (no lleves blanca), pero ¿sabes qué? Valió cada mota de polvo.
Sí, la recogida y regreso al hotel están incluidos dentro de un radio de 30 km alrededor de Rethymno.
Se requiere licencia de conducir válida con al menos 1 año de antigüedad; la edad mínima es 21 años.
No, las bebidas en el café junto al lago Potami no están incluidas en el precio.
Los bebés pueden ir en cochecito; hay asientos especiales para ellos disponibles.
Evita camisetas blancas y chanclas; lleva protección solar porque te vas a llenar de polvo.
Sí, el transporte está adaptado para sillas de ruedas.
El tour dura medio día; el tiempo exacto depende de las paradas y el ritmo del grupo.
Se incluye agua embotellada y snacks durante la excursión desde Rethymno.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel en un radio de 30 km de Rethymno (en furgoneta o jeep), agua embotellada para mantenerte hidratado, snacks en el camino, uso de cascos para seguridad y la guía de un experto local que conoce cada rincón de estos senderos antes de llevarte de vuelta al pueblo.
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