Vuela desde Oahu directo al exuberante este de Maui para pasar un día completo recorriendo la legendaria Road to Hana: playas de arena negra bajo tus pies, nadar bajo cascadas si te atreves y compartir historias en un almuerzo orgánico. Guías locales hacen que todo sea auténtico y cercano durante todo el día.
Lo primero que me impactó fue el aroma: tierra mojada y algo dulce, quizá guayaba, que entraba por la ventana de la van mientras salíamos del aeropuerto de Kahului. Nuestro guía, Kaleo, tenía ese don de señalar detalles que uno nunca notaría solo, como cómo cambia la luz justo antes de una lluvia en la Hana Highway. Se detuvo cerca de Pa'ia para mostrarnos las ruinas de un antiguo ingenio azucarero, pero yo ya estaba distraído viendo a los surfistas en Hoʻokipa Beach Park lanzándose a olas que parecían demasiado grandes para estar tranquilos. El viento allí es tan fuerte que parece que se estuviera riendo de ti.
No esperaba que la carretera se sintiera tan viva. Cada curva era un destello de verde o un azul intenso del océano, a veces ambos a la vez. En Waiʻanapanapa State Park bajamos hasta la playa de arena negra y recuerdo que la arena estaba extrañamente fresca entre mis dedos, nada que ver con el calor que imaginaba. Había niños trepando sobre rocas de lava y alguien tocaba el ukulele en algún lugar arriba. El almuerzo fue en Hana Farms, un lugar al aire libre donde todo sabía a recién cosechado. Probé el fruto del pan por primera vez (no sé si me encantó), pero su pizza estaba deliciosa.
Kaleo paró en Puaʻa Kaʻa State Wayside Park para que quien quisiera pudiera nadar en una piscina natural bajo la cascada. El agua estaba tan fría que te hacía jadear, pero en un minuto ya no quería salir. En el camino de regreso por la misma ruta, todo parecía distinto: las sombras más profundas, los colores más suaves. Pasamos más puentes de los que pude contar; algunos tan estrechos que Kaleo bromeaba sobre la “etiqueta vial en Maui”, que básicamente es saludar a todos los coches que cruzas (yo perdí la cuenta). Para entonces, todos en el grupo estaban callados o dormitando, salvo una pareja que seguía discutiendo si habían visto un mangosta o solo un gato flaco cerca de Hana.
Sigo pensando en esos momentos en que todo se ralentizaba: el sonido del agua golpeando las rocas o simplemente ver la niebla deslizarse sobre las colinas selváticas. Es difícil explicar por qué eso se queda conmigo más que cualquier foto.
Sí, el vuelo ida y vuelta entre islas desde Oahu está incluido en tu reserva.
No se menciona recogida en hoteles; el transporte comienza en el aeropuerto de Kahului en Maui.
El almuerzo se sirve en Hana Farms con opciones predefinidas, incluyendo pizza y productos orgánicos.
Sí, hay opción de nadar en una piscina natural bajo una cascada en Puaʻa Kaʻa State Wayside Park si el clima lo permite.
El trayecto toma varias horas en cada dirección por las carreteras curvas y las paradas para disfrutar el paisaje.
Sí, todas las entradas a parques están cubiertas dentro del paquete del tour.
No se recomienda para viajeros con lesiones en la columna o problemas cardiovasculares debido a las curvas y terrenos irregulares.
Las paradas principales incluyen Hoʻokipa Beach Park, Waiʻanapanapa State Park (playa de arena negra), Puaʻa Kaʻa State Wayside Park (cascada) y almuerzo en Hana Farms.
Tu día incluye vuelos ida y vuelta entre Oahu y Maui, transporte terrestre con aire acondicionado desde el aeropuerto de Kahului por la Road to Hana con narración de un guía local, todas las entradas a parques como Waiʻanapanapa y Puaʻa Kaʻa, además de un almuerzo en una granja orgánica con opciones de pizza antes de regresar por la misma ruta panorámica.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?