Agárrate fuerte mientras tu Jeep privado sube por Hell’s Revenge Trail con un guía local al volante. Descubre huellas reales de dinosaurios en la roca roja y detente en un mirador sobre el río Colorado con vistas a la parte trasera de Arches. Con aire acondicionado o calefacción y agua fría, sentirás la aventura sin perder la comodidad, llevándote recuerdos que perduran mucho después de sacudir el polvo de tus zapatos.
Con los dedos tamborileando en la puerta del Jeep, intentaba disimular los nervios mientras nuestro guía—Jake, nacido y criado aquí—nos subía por esa locura de roca. Él solo sonrió al ver mis manos blancas y me dijo: “Esta es la parte fácil.” Las ruedas raspaban la piedra con un sonido arenoso que vibraba hasta los pies, y de repente estábamos tan inclinados que solo veía cielo por la ventana. Mi amigo atrás soltó una risa que era mitad pánico, mitad emoción. No hay forma de prepararse para lo cerca que estás del borde aquí—Moab no se anda con medias tintas.
En algún punto del Hell’s Revenge Trail (el nombre no engaña), Jake paró para que estiráramos las piernas. Señaló unas marcas extrañas en la piedra roja: huellas auténticas de dinosaurios, casi increíbles hasta que nos contó cómo los locales crecieron escuchando esas historias. El sol quemaba seco, impregnando todo con ese olor a polvo y salvia. Hubo un momento de silencio solo roto por el viento entre los arbustos—pensé en lo antiguo que se siente todo aquí, como si el tiempo corriera distinto en Moab.
Las subidas se pusieron más empinadas después. En un momento juraría que estábamos casi verticales—mi estómago dio un vuelco raro, pero Jake seguía hablando de crecer entre estas rocas como si nada. Cuando llegamos al mirador sobre el río Colorado, nadie dijo nada por un instante. Se ve todo hasta el otro lado de Arches; no es solo bonito, es casi sobrecogedor. Nos sentamos con agua fría (recién sacada del aire acondicionado del Jeep) y solo miramos cómo la luz se movía sobre los acantilados. De regreso, todos íbamos más callados—quizá cansados o simplemente dejando que todo se asentara.
La duración no está especificada, pero normalmente las excursiones por Hell’s Revenge Trail duran entre 2 y 3 horas.
Sí, los Jeeps están completamente cerrados con aire acondicionado o calefacción para mantener a los pasajeros cómodos en el clima del desierto de Moab.
Sí, los bebés pueden ir en el regazo de un adulto; los niños pequeños pueden viajar en cochecito dentro del vehículo.
Experimentarás subidas y bajadas empinadas, verás huellas de dinosaurios en la roca roja y harás una parada en un mirador sobre el río Colorado con vistas a la parte trasera de Arches.
Se proporciona agua embotellada para todos los pasajeros durante la aventura privada en Jeep.
El tour es para un máximo de cuatro personas por Jeep; grupos más grandes deben reservar con anticipación.
Sí, el transporte es accesible para sillas de ruedas en este tour.
Tu día incluye recogida en el inicio del sendero en un Jeep cerrado con aire acondicionado o calefacción según sea necesario, agua embotellada durante todo el recorrido, paradas para ver huellas de dinosaurios en Hell’s Revenge Trail y tiempo en un mirador espectacular sobre el río Colorado antes de regresar al punto de partida en Jeep.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?