Sentirás la energía de Miami cambiar mientras navegas frente a las mansiones de Fisher Island y el bullicio de Bayside Marketplace en un tour privado con capitán. Con vistas al skyline, música y tiempo para flotar o nadar, es una experiencia vibrante y a la vez tranquila, que se queda en la memoria mucho después de atracar.
Confieso que tenía mucha curiosidad por ver Miami desde el agua — no solo el skyline, sino toda la vibra que se siente. Cuando subimos a nuestro barco privado en la marina (casi me tropiezo con mis propias chanclas), el capitán sonrió y nos dijo que nos sintiéramos como en casa. Había un aire salado y un zumbido suave del motor mientras nos alejábamos, que marcó el ambiente. Es curioso cómo se te olvida el móvil cuando estás ahí afuera.
La ciudad se ve distinta desde la Bahía de Biscayne — más alta, pero también con un contorno más suave. El capitán señaló Fisher Island (“ahí están esas mansiones locas,” dijo entrecerrando los ojos) y bajó la velocidad para que pudiéramos verlas bien. Intenté adivinar quién vivía en cada una, pero la verdad me entretenían más los pelícanos que planeaban a nuestro lado. Durante todo el paseo sonaba música por el sistema Bluetooth — alguien puso a Gloria Estefan y todo encajó perfecto.
Navegamos cerca de Bayside Marketplace, que desde lejos ya se sentía lleno de vida — gente saludando desde los restaurantes, barcos pasando con niños riendo a carcajadas. En un momento nos acercamos al Puerto de Miami y vimos esos enormes cruceros alineados como ciudades flotantes. El capitán tenía historias de cada uno; parece que trabajó en uno hace años (“nunca más,” dijo negando con la cabeza). Anclamos un rato para usar una alfombra gigante flotante — al principio no quería meterme (el agua se veía fría), pero cuando todos se lanzaron, me animé. En realidad estaba más cálida de lo que esperaba.
Las dos horas volaron. Al regresar a la marina, esa luz dorada del atardecer lo iluminaba todo justo en el momento perfecto — me dio ganas de haber sacado más fotos, pero también me alegré de no haber estado todo el tiempo pegado a la pantalla. Si estás pensando en reservar un tour privado en barco por Miami con amigos o familia… puede que termines recordándolo por razones que ni imaginabas.
El tour privado puede acomodar hasta 12 pasajeros.
Sí, el barco cuenta con baño para los pasajeros.
Se incluye agua embotellada para los invitados durante el recorrido.
Verás las mansiones de Fisher Island, Bayside Marketplace, los cruceros en PortMiami y el skyline de la ciudad.
Sí, hay un sistema de música Bluetooth para que los pasajeros disfruten.
El tour es apto para todos los niveles de condición física.
Sí, se permiten animales de servicio a bordo.
Incluye una alfombra flotante de 12 pies para nadar o relajarse en la bahía.
Tu viaje de dos horas incluye agua embotellada para refrescarte bajo el sol de Florida, una nevera con hielo si traes bebidas o snacks extra, acceso a baño a bordo para mayor comodidad, altavoces Bluetooth para tu playlist favorita y una gran alfombra flotante para que te zambullas o descanses en la Bahía de Biscayne antes de volver a tierra.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?