Recorre Hollywood y Beverly Hills con un guía local divertido y espontáneo. Toma fotos del letrero de Hollywood desde Mulholland Drive, pasa por casas de celebridades en Beverly Hills y visita lugares icónicos como Rodeo Drive y Sunset Strip, sin preocuparte por el tráfico o el estacionamiento. Seguro te sorprenderás riendo con anécdotas inesperadas o tarareando clásicos sin darte cuenta.
Ya íbamos recorriendo Hollywood Boulevard cuando nuestro guía—¿Carlos, creo?—puso unos clásicos y señaló las primeras estrellas en el Paseo de la Fama. Tenía esa habilidad de mezclar datos curiosos con bromas que nos mantuvieron despiertos, incluso después de un vuelo largo. El aire estaba cargado de humo de autos y algo dulce que vendía un puestito cerca. Intenté sacar una foto de la estrella de Marilyn Monroe, pero llegué tarde; la verdad, muy lento. Alguien detrás mío empezó a tararear “Pretty Woman” justo cuando girábamos hacia Rodeo Drive—no pude evitar reírme.
Hay algo emocionante y raro en ver esas calles bordeadas de palmeras en Beverly Hills en persona, aunque sea desde la ventana del bus. Carlos bajó la velocidad frente a una de esas enormes puertas y susurró (lo suficientemente alto para que todos escucháramos) de quién era la casa—no diré quién, pero mi madre se habría vuelto loca. No paramos en ningún lado, lo cual me pareció bien; el tráfico en LA es otro rollo. Aun así, nos acercamos lo suficiente para sacar algunas fotos borrosas a través del vidrio. En un momento, un convertible se puso a nuestro lado y alguien saludó—no tengo idea si era famoso o solo disfrutaba el paseo como nosotros.
Lo mejor para mí fue esa vista brumosa del letrero de Hollywood desde Mulholland Drive. Es más pequeño de lo que imaginaba, pero igual tiene algo mágico con la ciudad extendida abajo. Alguien le preguntó a Carlos si alguien se cuela ahí de noche; él sonrió y dijo que no lo recomendaría a menos que quieras conocer a los policías de LA. El bus pasó por clubes en Sunset Strip—el Viper Room parecía más pequeño que en las películas—y de repente estábamos frente a ese muro rosa con el que todos se toman selfies. No es lo mío, pero la mitad del grupo se asomó igual para las fotos.
No esperaba sentirme tan parte de una película ajena. Todo el tour fue rápido pero con un toque personal—quizás porque Carlos soltaba historias de escenas de cine o encuentros con famosos (verdaderas o no, quién sabe). Para cuando regresamos al Teatro Chino y las huellas del Dolby Theater, me di cuenta de que casi no había mirado el móvil—y eso hoy en día dice mucho.
No, este tour es solo para ver desde el bus; no hay paradas para bajar.
Verás el letrero de Hollywood (desde Mulholland Dr), casas de celebridades en Beverly Hills, Rodeo Drive, Sunset Strip, Paseo de la Fama, Teatro Chino TCL, Dolby Theater y más.
El tour incluye transporte privado, pero no menciona recogida específica en hoteles.
Sí, bebés y niños pequeños pueden ir en cochecito o silla durante el recorrido.
Sí, se permiten animales de servicio a bordo según la política de la empresa.
Sí, es apto para todos porque estarás sentado durante todo el recorrido.
Tu día incluye transporte privado en bus por Hollywood y Beverly Hills con un guía local que te contará todo en el camino; permanecerás a bordo mientras pasas por lugares famosos como Rodeo Drive y Sunset Strip sin necesidad de caminar.
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