Remarás por la costa de Denia con un guía local, explorarás Cova Tallada con linterna (¡ojo al pisar!), luego disfrutarás de un tentempié antes de hacer snorkel en las piscinas naturales junto a la cueva. Agua cristalina, historias de contrabandistas y canteros, y momentos tranquilos que se quedan en la memoria.
No esperaba que el mar estuviera tan tranquilo cuando partimos desde Denia — solo un leve olor a sal y ese silencio raro que se siente justo antes de que todos empiecen a remar. Nuestro guía, Javi, nos sonrió como si guardara un secreto. Señaló unas antiguas casetas de pesca escondidas entre las rocas (yo ni las habría visto) y nos contó que Cap de Sant Antoni fue un refugio de contrabandistas. Probablemente debería haber prestado más atención, pero la verdad es que me distrajo el agua tan clara que se veía bajo mi kayak — se podían ver esos pececillos que se movían rápido.
El trayecto no fue difícil, incluso para alguien como yo que no es muy deportista. La frase clave aquí sería “excursión en kayak y snorkel a Cova Tallada”, pero eso no transmite lo que se siente al llegar a la cueva. Es enorme y oscura por dentro, más fresca que afuera (lo que se agradeció después de sudar bajo el sol). Javi nos repartió linternas y nos guió por un túnel con eco donde cada paso crujía sobre piedras antiguas. En un momento se detuvo y enfocó la luz en unas marcas raras en la pared — al parecer, de los canteros que trabajaron allí hace siglos. Había un olor terroso mezclado con aire marino, algo a humedad pero nada desagradable.
Después nos sentamos justo fuera de la cueva para un tentempié (fruta y unas galletitas típicas), con las piernas colgando sobre el borde. La luz del sol reflejada en el agua lo volvió todo dorado por un instante — a veces todavía recuerdo esa imagen. El snorkel en la poza junto a la entrada estaba frío al principio, pero valió la pena; bancos de peces plateados nadaban alrededor de nuestros pies. De vuelta, con los brazos cansados pero contentos, nadie habló mucho — solo escuchábamos el chapoteo de los remos y el reclamo de las gaviotas arriba. Fue un momento perfecto, la verdad.
No necesitas experiencia previa en kayak; solo saber nadar un poco.
Sí, todo el equipo de snorkel está incluido en la excursión.
La ruta en kayak es corta y apta para principiantes; el tiempo exacto depende del ritmo del grupo.
Se ofrece un pequeño tentempié en la entrada de la cueva, no una comida completa.
La actividad está abierta a la mayoría de personas con buena forma física y que sepan nadar; no se recomienda para embarazadas ni personas con problemas de columna o corazón.
Sí, los guías están certificados y autorizados por el Parque Natural del Montgó.
Lleva bañador, crema solar, escarpines si tienes, y quizás una bolsa impermeable para tus cosas personales.
Tu día incluye todo el equipo de kayak, agua embotellada para las pausas, uso del equipo de snorkel (y neopreno si hace frío), seguro de accidentes, linternas para explorar dentro de Cova Tallada, y un tentempié sencillo en la entrada antes de regresar a Denia con el grupo.
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