Sentirás cómo Dubai se transforma mientras navegas junto a Palm Jumeirah y Atlantis en tu mini yate privado—saltando al agua, disfrutando bebidas frescas bajo el sol y contemplando el skyline icónico con amigos o familia. No es solo turismo, es sentir que perteneces a ese espacio en el agua, aunque sea por solo tres horas.
No esperaba reír tanto en este mini crucero en yate por Dubai. Siempre me pareció una ciudad demasiado brillante, pero verla desde el agua—con esa brisa salada y los pies colgando—es otra historia. Subimos en Dubai Marina (nos enviaron un pin, perfecto porque soy un desastre con las direcciones), y el capitán nos saludó como si fuéramos viejos amigos. Tenía una sonrisa relajada, nos dijo que nos sintiéramos como en casa y nos indicó dónde dejar las cosas. Se mezclaban en el aire el olor a protector solar y a aceite del motor. No era desagradable, sino... auténtico.
Lo mejor llegó cuando pasamos junto a Palm Jumeirah y Atlantis; me di cuenta de lo enormes que son en persona. Nuestro guía, Sameer, nos contó historias increíbles sobre cómo construyeron esas islas (arena bombeada del fondo del mar, según dijo). Intenté imaginarlo, pero terminé hipnotizado por el agua azul tan intensa. Paramos para nadar cerca de la Palm; dudé un momento (el Golfo no es precisamente mi zona de confort), pero todos saltaron, así que me animé. El agua estaba cálida, casi sedosa al contacto. Alguien puso música por los altavoces del barco—algo pop—y de repente parecía que habíamos entrado en otro mundo por un rato.
Llevé snacks porque decían que se podía, pero la verdad casi ni los tocamos; con jugos y agua fría bastaba para el solazo. Hay Wi-Fi a bordo, pero nadie quiso mirar el móvil después de un rato—no sé si eso es bueno o malo hoy en día. En un momento, al pasar por Burj Al Arab, Sameer bajó la velocidad para que pudiéramos sacar fotos sin prisas. La luz rebotaba en el cristal del hotel como si posara solo para nosotros. Es curioso lo que se queda en la memoria—aún pienso en esa vista cuando el ruido de casa me abruma.
El crucero dura 3 horas recorriendo los principales puntos de Dubai.
Sí, hay tiempo para detenerse y nadar en el mar durante el recorrido.
Se incluyen jugos y agua embotellada para los pasajeros a bordo.
Sí, hay Wi-Fi gratis durante todo el tiempo a bordo.
El mini yate zarpa desde la zona de Dubai Marina.
Puedes llevar tu propia comida y bebidas para disfrutar durante el paseo.
Sí, los bebés y niños pequeños pueden acompañar—pueden ir en cochecito o silla de paseo.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del lugar de embarque.
Tu día incluye jugos y agua embotellada gratis, Wi-Fi a bordo para compartir momentos al instante (si quieres), y un cable AUX para la música. Puedes traer tus propios snacks o picnic, y siempre habrá alguien para ayudarte con fotos o dudas antes de volver a tierra.
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