Bajas del avión en El Cairo y un conductor local te espera para encargarse de todo: maletas, indicaciones y esas primeras dudas nerviosas. Disfruta de un coche con aire acondicionado en tu traslado privado desde el aeropuerto de El Cairo a Giza (o viceversa), con seguro y seguimiento para tu tranquilidad. Mientras avanzas, la vida de la ciudad pasa rápido por tu ventana hasta llegar directo a tu hotel o dirección.
Es curioso cómo el aire cambia en cuanto sales del aeropuerto de El Cairo: una brisa cálida y polvorienta, y un murmullo constante de voces alrededor. Vi mi nombre en un cartel (siempre un pequeño alivio) y nuestro conductor, Mahmoud, me saludó con una sonrisa tranquila. No nos apuró en ningún momento, aunque yo estaba un poco torpe con las maletas y el móvil no paraba de sonar. El coche estaba impecable y, después de ese vuelo nocturno, hundirme en el asiento fresco fue casi un milagro.
Salimos a la maraña del tráfico cairota: bocinas, destellos de colores, gente saludando desde sus motos. Mahmoud me señaló dónde se veía el Nilo entre los edificios (“Eso es Zamalek,” me dijo), y yo intentaba absorberlo todo, aunque más bien me quedaba observando sus manos al volante. Me contó que cada coche tiene un GPS (“por seguridad — reglas del Ministerio”), lo que hizo que mi mente agotada se relajara un poco más. Había reservado este traslado privado desde el aeropuerto a Giza para evitar líos con taxis o regateos nada más aterrizar, y valió la pena solo por eso.
El viaje duró unos 40 minutos, más o menos; el tiempo se vuelve borroso cuando estás cansado y todo es nuevo. Cerca de Giza hubo un momento en que, entre la neblina de la ciudad, apareció la silueta de las Pirámides — aún lejos, pero inconfundibles. Mahmoud sonrió al verme embobada. “¿Primera vez?” preguntó. Solo asentí, porque ¿qué más se puede decir? El viaje terminó justo en la puerta de mi hotel, sin líos con taxímetros o maletas. Aún recuerdo lo fácil que fue comparado con otras llegadas.
Sí, el traslado privado funciona las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Sí, todos los coches cuentan con seguro completo, incluyendo seguro de pasajeros y de equipaje.
Los sedanes pueden llevar hasta tres pasajeros; las minivans hasta cinco.
Sí, el servicio está adaptado para sillas de ruedas.
Sí, los bebés y niños pequeños pueden ir en cochecito o silla de paseo durante el traslado.
Sí, los animales de servicio están permitidos durante el traslado privado.
Tu equipaje está cubierto por el seguro para mayor tranquilidad.
No se especifica el nivel de idiomas; la mayoría de conductores manejan inglés básico para recibir a los pasajeros.
Tu viaje incluye transporte privado en vehículo con aire acondicionado y seguro completo para pasajeros y equipaje; recogida directa en el aeropuerto de El Cairo o en cualquier dirección en Giza a la hora que necesites — sin preocuparte por taxímetros ni buscar taxi al llegar.
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