Irás directo del Aeropuerto de Liberia a tu hotel en Tamarindo con total comodidad—sin esperas ni buses llenos. Los conductores locales facilitan paradas para snacks o fotos, y están preparados para todo: niños, mascotas, sillas de ruedas. Viajar sin complicaciones con la auténtica calidez costarricense.
Al salir del Aeropuerto de Liberia, vi mi nombre en un cartel—siempre un alivio después de un vuelo largo. El aire estaba cálido y un poco pegajoso, pero el fresco del aire acondicionado nos recibió en cuanto abrimos la puerta de la van. Nuestro conductor, Andrés, nos saludó con una sonrisa y nos entregó botellas de agua fría (la verdad, ese primer sorbo fue un pequeño paraíso tras pasar migración).
El viaje a Tamarindo no es corto—unos 75 minutos si no hay tráfico—pero es tranquilo. Pasamos por puestos de frutas en la carretera vendiendo piñas y grupos de locales charlando afuera de pequeñas sodas (así llaman a los cafés aquí). Andrés se ofreció a parar donde quisiéramos: para ir al baño, comprar algo o simplemente para sacar fotos de esas colinas verdes tan intensas. Conocía todos los atajos y respondió todas nuestras preguntas sobre la zona—como por qué las vacas aquí se ven tan diferentes a las de casa.
Noté que la van tenía mucho espacio para nuestras maletas (y tablas de surf), además de asientos para bebés ya instalados para nuestros mellizos. Si viajas con mascotas o necesitas acceso para silla de ruedas, solo avísales con anticipación—lo arreglan sin complicaciones. Incluso cuando nuestro vuelo llegó tarde por una tormenta en Houston, no hubo estrés; Andrés nos esperaba justo en llegadas, sin costo extra ni quejas.
¡Claro! Solo pídele al conductor, con gusto se detendrá para snacks, baños o fotos cuando quieras.
No te preocupes. Tu conductor seguirá la hora de llegada y te esperará sin costo extra, incluso si aterrizas tarde en la noche.
¡Sí! Hay asientos para bebés disponibles bajo pedido y mucho espacio para cochecitos o carriolas en la van.
Puedes llevar a tu mascota—solo menciona esto al reservar para que puedan prepararse.
Tu minibús privado con aire acondicionado y conductor local experimentado; agua embotellada para cada pasajero; combustible y peajes incluidos; paradas flexibles en ruta; asientos para bebés si se necesitan; opciones accesibles para sillas de ruedas y animales de servicio; recogida 24/7 en el aeropuerto sin costo extra por retrasos.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?