Saldrás desde Santiago hacia los valles salvajes del Cajón del Maipo, caminarás por un antiguo túnel ferroviario (si el clima lo permite) y disfrutarás un picnic sencillo con vino local junto al agua azul increíble del Embalse El Yeso, todo mientras tu guía te cuenta historias en el camino. Prepárate para el aire frío en las mejillas y quizás alguna risa por jugo derramado.
“Esto vas a querer verlo,” nos dijo Pablo, nuestro guía, justo cuando salíamos de Santiago y doblábamos una curva. La ciudad quedó atrás y el valle del Cajón del Maipo se abrió ante nosotros, como si alguien hubiera corrido una cortina. Hacía más frío de lo que esperaba, aunque el sol brillaba. El aire olía a piedra mojada y a pino. Paramos a tomar café en un lugar que parecía una casita de jengibre, conocido por los locales como la Casa de Chocolate. Afuera, los niños corrían y alguien había encendido un fuego en un barril oxidado. Me quemé la lengua con el café, pero no me importó; era reconfortante tener algo caliente entre las manos y simplemente quedarme ahí.
Pablo nos contó historias del antiguo ferrocarril mientras nos adentrábamos en la montaña. Señaló lugares donde aún se veían restos de rieles asomando entre la hierba. Hicimos una parada en el túnel El Tinoco, que es largo y oscuro por dentro —la verdad, dudé un momento antes de entrar. Algunos dicen que está embrujado (Pablo guiñó un ojo al decirlo), pero en realidad solo estaba húmedo y con ecos, donde nuestros pasos rebotaban en las paredes. Al salir, reinaba un silencio extraño, solo roto por el viento rozando las rocas. Esa parte me gustó más de lo que esperaba.
Pero lo más impresionante es el Embalse El Yeso. No te das cuenta de lo azul que es el agua hasta que estás justo al lado. Nos sentamos a hacer un picnic: pan, queso, fruta y vino chileno servido en vasos de plástico (lo que nos sacó más de una risa). El viento intentaba robar nuestras servilletas sin parar. Pablo nos explicó lo importante que es el embalse para el agua de Santiago, y lo hizo con un orgullo tranquilo. Recuerdo estar ahí con los dedos fríos, pensando en lo pequeño que parecía todo frente a estas montañas.
El viaje en vehículo desde Santiago hasta el Cajón del Maipo dura aproximadamente entre 1.5 y 2 horas.
Sí, el traslado desde tu alojamiento en Santiago está incluido.
El picnic incluye pan, queso, fruta, jugo y vino chileno.
La visita al túnel El Tinoco es opcional y depende del clima o limpieza; tu guía decidirá si se puede hacer.
No, no se recomienda para embarazadas ni para personas con problemas de columna o cardiovasculares.
El guía habla español y a menudo inglés; consulta al reservar si necesitas otro idioma.
Todos los costos de entrada necesarios están incluidos en el precio del tour.
Tu día incluye traslado desde Santiago en vehículo con aire acondicionado, todas las entradas en el recorrido, incluyendo paradas opcionales como el túnel El Tinoco si las condiciones lo permiten, y un picnic ligero con vino chileno o jugo junto al Embalse El Yeso antes de regresar por la tarde.
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