Degustarás vinos locales directo de los viñedos de Swan Valley, compartirás papas fritas en una cervecería con música en vivo los fines de semana, y probarás quesos frescos y chocolates artesanales durante el recorrido. Con recogida incluida y grupo pequeño, tendrás historias del guía y tiempo para disfrutar el almuerzo sin prisas.
Lo primero que noté al salir de Perth fue cómo el ruido de la ciudad se desvanecía — de repente todo era espacio abierto y esos cielos infinitos de Australia Occidental. Nuestro conductor y guía, Mark, tenía una manera muy relajada de llevar el grupo (bromeaba diciendo que llevaba bebiendo vino de Swan Valley desde antes de que yo naciera). Paramos primero en una bodega familiar; el dueño nos sirvió un chenin blanc que sabía a sol y también un poco a manzana verde. No soy experta en notas de vino, pero seguro me entiendes. En la mesa había pan recién hecho, todavía tibio, y el perro de alguien dormía bajo las vides. Me gustó que nadie nos apurara.
Después llegó la tabla de quesos y el té de la mañana — la verdad, no esperaba comer tanto tan temprano. Había un queso azul desmenuzable que hizo que mi amiga pusiera cara (ella no es fan de los quesos con moho), pero a mí me encantó. Al mediodía llegamos a otro lugar para almorzar — grandes ventanales con vistas a las vides y el aroma a pollo asado que llegaba desde la cocina. Mark nos contó historias de familias de viñedos que llevan generaciones aquí. Más tarde, en la parada de la cervecería, había música en vivo (solo los fines de semana) y compartimos papas fritas mientras dudábamos entre sidra o cerveza. El chico de la barra me miró cuando pedí ambos — “¿Por qué no?”, se rió.
Creo que lo que más me gustó fue justo antes de irnos — una degustación de chocolates en una tiendita diminuta donde todo olía a cacao y azúcar. Me hizo sentir como cuando era niña. De regreso a Perth, todos estuvimos en silencio un rato — tal vez por la siesta post comida o simplemente viendo cómo la luz del sol se colaba entre los eucaliptos. En fin, si buscas un tour de un día a Swan Valley desde Perth que no sea nada turístico ni formal, este me pareció muy auténtico. Todavía recuerdo esa luz perezosa de la tarde allá afuera.
Es una experiencia de día completo con salida desde Perth y recogida incluida; la duración exacta varía según las paradas.
Sí, el almuerzo está incluido junto con las catas de vino, cerveza o sidra en la cervecería, tabla de quesos para el té de la mañana y muestras de chocolate.
Puedes solicitar requisitos dietéticos al reservar; hay opciones vegetarianas disponibles.
Se ofrece recogida y regreso desde puntos de encuentro designados en Perth.
Sí, el transporte es accesible para sillas de ruedas; se pueden acomodar sillas plegables si van acompañadas de asistencia.
Los niños pueden unirse si van acompañados por un adulto; la edad mínima para degustar alcohol es 18 años.
El tour se realiza casi con cualquier clima; los lugares pueden cambiar si es necesario por circunstancias imprevistas.
Tu día incluye recogida y regreso desde puntos centrales en Perth, transporte guiado en vehículo con aire acondicionado y conductor local, té de la mañana con tabla de quesos, varias catas de vino en bodegas de Swan Valley, una copa de vino (o cerveza/sidra) con almuerzo en un lugar con vistas, papas fritas para compartir en la parada de la cervecería (con música en vivo los fines de semana) y degustación de chocolates antes de volver por la tarde.
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