Únete a un grupo pequeño de buzos certificados para dos inmersiones guiadas en Aruba—una en arrecifes vibrantes y otra explorando naufragios históricos—con snacks a bordo y toda la logística cubierta. Disfruta de guías locales amigables, recogida en hotel y momentos de asombro silencioso bajo el agua que recordarás por mucho tiempo.
Aún recuerdo la primera bocanada de aire salado al salir del muelle Bucutiweg—un golpe fresco y vibrante, pero agradable. Ya había estado en Aruba antes, pero nunca había visto lo que se escondía bajo las olas. Nuestro guía de buceo, Carlos, nos recibió con una sonrisa relajada y empezó a revisar nuestro equipo. Me llamaba “amiga” cada vez que me enredaba con las correas (que fue varias veces). El barco se sentía animado pero sin agobios—éramos solo siete más Carlos y su asistente, así que se escuchaba el agua rozando el casco.
El primer punto de buceo fue un arrecife—no recuerdo el nombre exacto, algo en papiamento que pronuncié tan mal que todos se rieron. El agua tenía ese turquesa de postal, y la verdad, me puse nerviosa un momento antes de sumergirme. Pero una vez abajo todo fue en cámara lenta: peces loro zigzagueando entre los corales, una suave corriente que movía mis aletas. En un momento vi a Carlos señalando un caballito de mar diminuto—casi no lo noto porque estaba fascinada con el silencio que había bajo el agua.
Entre inmersiones descansamos en la cubierta comiendo piña y charlando sobre otros destinos de buceo (alguien acababa de venir de Bonaire). El sol pegaba fuerte y hacía que el traje se me pegara a los brazos, pero la brisa lo hacía soportable. La segunda inmersión fue sobre un naufragio—huesos oxidados esparcidos sobre arena blanca. Es curioso lo tranquilo que se siente un naufragio de cerca; nadie hablaba mucho al salir del agua, solo algunas bromas sobre quién se quedó sin aire primero (yo otra vez). Luego volvimos a la orilla con sal en el cabello y esa felicidad cansada que te queda tras vivir algo nuevo. Todavía pienso en esos destellos de color bajo la superficie.
La excursión sale a las 9:00 am desde el muelle Bucutiweg 20.
Sí, incluye recogida y regreso al hotel o terminal de cruceros.
Sí, todos los participantes deben mostrar su certificación de buceo.
El máximo es de 8 buzos certificados por guía de buceo.
Sí, hay snacks y bebidas a bordo entre las inmersiones.
Sí, la excursión es accesible para sillas de ruedas.
La edad mínima es 10 años para buzos certificados.
Los bebés pueden ir en cochecito o en brazos de un adulto; también se permiten animales de servicio.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel o puerto de cruceros en cualquier zona Low & High Rise de Aruba, instrucción profesional con guías locales, impuestos oficiales incluidos, además de snacks y bebidas a bordo entre inmersiones antes de regresar juntos a tierra al mediodía.
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