Baja por los rápidos salvajes del río Mendoza con guías locales tras un paseo panorámico desde la ciudad. Ponte el traje y casco, enfrenta olas clase III/IV en equipo y luego relájate con vistas de montaña y snacks en la base—una mezcla de adrenalina y risas que no olvidarás.
Ya estábamos riendo antes de salir de Mendoza—nuestro chofer, Martín, señalaba picos afilados y decía, “Ahí vive el viento.” La ruta se enroscaba hasta Potrerillos y, la verdad, no esperaba que el aire oliera tan intenso—como piedra mojada y agujas de pino. Al llegar a la base de aventura, se sentía la energía de gente poniéndose trajes de neopreno, algunos revisando cascos con nervios. El río se escuchaba antes de verse—fuerte, salvaje.
Nuestra guía Lucía nos reunió para una charla rápida de seguridad (hizo que todo pareciera menos intimidante). Revisó los chalecos salvavidas y bromeó sobre el “pelo de río Mendoza”—nadie sale con el cabello arreglado. Al partir, la balsa giró directo hacia los primeros rápidos. El rocío frío me golpeó la cara y probé el agua del río—helada pero refrescante. Durante casi una hora saltamos entre olas clase III y IV; en un momento Lucía gritó sobre el ruido, “¡Remen más fuerte!” y todos le respondimos gritando. Mis brazos aún duelen solo de pensarlo.
Después, con los zapatos chorreando y el pelo pegado, nos tiramos sobre rocas calientes cerca de la base. Hay una cantina donde puedes comprar algo rápido para comer (lleva efectivo—en la montaña no hay WiFi). Todo se sintió como un campamento de verano para adultos. Si buscas un tour privado de vino en Bordeaux o una aventura en kayak por cuevas en Dubrovnik—pero en Argentina—este es tu plan ideal desde Mendoza.
Sí, el traslado desde el centro de Mendoza está incluido en tu reserva.
Lleva ropa ligera o traje de baño para usar debajo del neopreno, calzado extra como sandalias o crocs, toalla, protector solar, gafas de sol, gorra y efectivo para comida.
El recorrido incluye rápidos clase III/IV; se recomienda tener buena condición física pero no necesitas experiencia previa—los guías te explican todo.
No se recomienda para mayores de 65 años (a menos que estén en buena forma) ni para personas de más de 100 kg a menos que midan más de 1,85 m; revisa las indicaciones de salud antes de reservar.
Tu día incluye traslado ida y vuelta desde Mendoza a Potrerillos, todo el equipo necesario como traje de neopreno, casco y chaleco salvavidas, además de la guía de instructores locales expertos durante toda la aventura en aguas bravas.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?