Remarás por cuevas marinas y acantilados con un guía local, desembarcarás en la arena de Cathedral Cove para disfrutar chocolate caliente y galletas. Grupos pequeños, aire salado en el cabello y tiempo para explorar o simplemente escuchar las olas bajo ese icónico arco.
Salimos desde la playa de Hahei tras una breve charla de seguridad — nuestro guía Sam bromeó sobre su “sombrero de la suerte” (que parecía haber vivido mejores días). El agua estaba tranquila y se olía ese aire salado tan característico. Yo estaba un poco nervioso con el remo, pero Sam no paraba de dar indicaciones (“¡Pala a la izquierda! ¡Ahora a la derecha!”), así que nunca me sentí perdido. Los acantilados de la Reserva Marina Te Whanganui-A-Hei son más altos de lo que parecen en las fotos — y no esperaba el eco cuando entramos en una cueva marina. Allí dentro se siente un silencio raro, solo roto por el goteo del agua y alguna risa nerviosa (sí, la mía).
Remando hacia Cathedral Cove, ves el arco abrirse mucho antes de llegar. Somos aparentemente el único grupo de kayak que puede desembarcar directamente en la arena, lo que me hizo sentir un poco orgulloso viendo a otros saludarnos desde sus botes en la distancia. Había algunos locales pescando cerca — uno nos saludó mientras arrastrábamos los kayaks por la playa. La arena se pegaba por todos lados, pero no me importó porque Sam sacó un termo y empezó a preparar capuchinos justo ahí. Tenía las manos heladas, así que ese primer sorbo fue pura magia. También había galletas — sencillas, pero después de remar supieron a gloria.
Todavía recuerdo lo azul que se veía todo esa mañana — el cielo, el agua, hasta las sombras bajo el arco. Tienes como una hora para disfrutar Cathedral Cove antes de regresar, tiempo justo para pasear o sentarte a escuchar las olas en silencio. No sé por qué, pero seguía recogiendo conchas para luego dejarlas donde estaban. De vuelta intentamos “navegar en kayak” con el viento a favor; casi pierdo el sombrero (el de Sam se quedó en su sitio). Así que sí, si estás pensando en una escapada en kayak desde Hahei hasta Cathedral Cove — esta es la experiencia.
Sí, es apto para todos los niveles físicos. Si tienes necesidades especiales, solo contacta directamente con ellos.
Sí, esta es la única empresa de kayak autorizada para desembarcar directamente en la playa de Cathedral Cove.
Sí, incluyen capuchinos o chocolates calientes y galletas en Cathedral Cove.
El tiempo varía según las condiciones, pero calcula alrededor de una hora por trayecto con paradas.
Sí, la empresa ofrece todo el equipo moderno necesario para el kayak.
Sí, operan durante todo el año sin importar la temporada.
Tu día incluye el uso de equipo moderno de kayak, además de capuchinos o chocolates calientes y galletas recién servidas en la playa de Cathedral Cove antes de regresar a Hahei con tu guía local.
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